Contratos inteligentes
Smart Blockchain / Hasta ahora la historia había definido un contrato como un convenio verbal o escrito entre dos o más personas para definir actividades a desarrollar entre sí.
Cuando se trata de documentos físicos, se plasman las reglas a seguir basándose en las leyes y jurisdicciones de cada territorio, contando además con la participación activa de funcionarios que garanticen la validez del mismo, acción que indiscutiblemente se traduce en más gastos y tiempo para los involucrados.
Además en la mayoría de los casos se requiere un abogado o experto para interpretar el contenido del convenio.
Pero actualmente, las cosas cambiaron, qué pensarías si te decimos que puedes recurrir a un contrato capaz de elaborarse y hacerse cumplir por sí solo.
Uno que sea capaz de generarse de manera autónoma y automática, donde no tengas que recurrir a notarios u otras figuras.
Pues, te damos la bienvenida al mundo de los Smart contracts o contratos inteligentes.
Estos no son más que códigos informáticos escritos con lenguajes de programación, que si bien pueden ser realizados por personas, también logran ser creados por máquinas u otros programas que funcionan de manera autónoma.
Tampoco tendrás que preocuparte por la burocracia, censuras, grandes costos o pérdida de tiempo, ya que se encontrará distribuido por miles de ordenadores, evitando que alguna compañía los custodie.
Imagina llegar a un estacionamiento e interactuar con un auto inteligente para alquilarlo que sea capaz de determinar por sí solo el tiempo de uso y realizar el cobro de servicio.
Todo esto ya es posible, entra ya al mundo de los contratos inteligentes.
Cuando se trata de documentos físicos, se plasman las reglas a seguir basándose en las leyes y jurisdicciones de cada territorio, contando además con la participación activa de funcionarios que garanticen la validez del mismo, acción que indiscutiblemente se traduce en más gastos y tiempo para los involucrados.
Además en la mayoría de los casos se requiere un abogado o experto para interpretar el contenido del convenio.
Pero actualmente, las cosas cambiaron, qué pensarías si te decimos que puedes recurrir a un contrato capaz de elaborarse y hacerse cumplir por sí solo.
Uno que sea capaz de generarse de manera autónoma y automática, donde no tengas que recurrir a notarios u otras figuras.
Pues, te damos la bienvenida al mundo de los Smart contracts o contratos inteligentes.
Estos no son más que códigos informáticos escritos con lenguajes de programación, que si bien pueden ser realizados por personas, también logran ser creados por máquinas u otros programas que funcionan de manera autónoma.
Trabaja con tecnología blockhain, lo que garantiza su transparencia, visibilidad y validez, sin depender de autoridades.
Tampoco tendrás que preocuparte por la burocracia, censuras, grandes costos o pérdida de tiempo, ya que se encontrará distribuido por miles de ordenadores, evitando que alguna compañía los custodie.
Imagina llegar a un estacionamiento e interactuar con un auto inteligente para alquilarlo que sea capaz de determinar por sí solo el tiempo de uso y realizar el cobro de servicio.
Todo esto ya es posible, entra ya al mundo de los contratos inteligentes.
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